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Por Grupo de Investigación de Economía Ecológica

En la actualidad del Cambio Climático y Global es objeto de un intenso debate internacional, siendo la problemática mundialmente reconocida como prioritaria en materia de lineamientos estratégicos de políticas de gestión de alcance nacional e internacional.

Las evidencias de que se están dando un rápido cambio climático son el aumento de la temperatura global donde la mayor parte de este calentamiento ha sucedido desde 1970; el aumento del nivel del mar que en la última década es casi el doble del l siglo pasado, aumentado 17 centímetros en el siglo XX; Y el consecuente calentamiento de los océanos que muestran un aumento de 0.302 grados Fahrenheit desde 1969; la disminución de la placas de hielo de Groenlandia y la Antártida y de la extensión y el grosor del hielo Ártico en las últimas décadas ; el retroceso de los glaciares en los Alpes, Himalayas, Andes, Alaska, África y otros lugares y la aparición de eventos meteorológicos extremos.

Por estas razones, se plantean desafíos actuales y escenarios futuros donde el Cambio Climático y sus consecuencias modifican situaciones de mercado, incrementa riesgos sanitarios y profundiza las situaciones de vulnerabilidad de sectores enteros de de la Argentina.

En consecuencia, el Cambio Climático, impone y complejiza las urgencias para el diseño de estrategias para su mitigación y la adaptación a sus efectos en una escala local, regional y nacional. En la práctica su tratamiento requiere también de una visión estratégica de mediano y largo plazo, que involucre tanto a organismos gubernamentales y no gubernamentales, públicos y privados y la ciudadanía, donde la Universidad no puede estar ausente (PIUBACC, 2008)(*1) .

Las Cumbres de Cambio Climático

En pos de buscar una solución se realizaron cumbres de cambio climático (COPs), que vienen llevándose a cabo anualmente desde 1995 (*2); cuyos resultados aún hoy en día son escasos.

De hecho la Cumbre de Kyoto en 1997 había sido sumamente auspiciosa, porque allí se elaboró el protocolo de Kyoto. Cuyo objetivo con el fin de promover el desarrollo sostenible, fue que cada una de las Partes que adhiriesen, a cumplir los compromisos cuantificados de limitación y reducción de las emisiones de CO2 (Art. 2 del Protocolo), según un principio central: el de la “responsabilidad común pero diferenciada”, en función del tipo de país y fuente de la emisión. Ese compromiso significaba de reducir el total de sus emisiones de esos gases a un nivel inferior en no menos de 5% al de 1990, en el período de compromiso comprendido entre el año 2008 y el 2012 (Art. 3 del Protocolo) (*3).

En 2012 en la COP 18 llevada a cabo en Doha, se analizaron los resultados, y pudo afirmarse que las Partes lograron cumplir parcialmente los objetivos previstos en Kyoto, para los negociadores estos resultados parecieron interesantes, sin embargo, para los especialistas los logros obtenidos fueron escasos y denotaban casi un fracaso. De todos modos, en esa Cumbrem se logró un acuerdo para extender el Protocolo (Kyoto 2), por una segunda fase de 8 años, desde el 1º de enero de 2013 hasta el 31 de diciembre de 2020. Pero pese a esta extensión el Protocolo de Kyoto estaba signado a fracasar.

En la última Cumbre, la COP 20 de Lima en el año 2014, el principal objetivo era el de consolidar el acuerdo definitivo para sustituir el Protocolo de Kyoto y generar un mecanismo de recaudación de los fondos para enfrentar el cambio climático y el compromiso de cada país en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Aunque los resultados no fueron los esperados, se planteó un debate significativo respecto de la controversia entre países desarrollados y en desarrollo y se aprobó el denominado “Llamado de Lima para la Acción Climática” o “Declaración de Lima”. Esta Declaración plantea como iniciativas centrales: El Programa de Reducción de Emisiones de Carbono causadas por la Deforestación y la Degradación de los Bosques, Planes Nacionales de Adaptación y Fondo Verde para el Clima.

Por el momento, la lucha contra el cambio climático parece haber fracasado porque la reducción global de emisiones ha sido un concepto más que una práctica real, en los hechos se constata que la quema de combustibles fósiles está un 61% por encima de los niveles de 1990, el año de referencia del Protocolo de Kioto. Los resultados tangibles son en definitiva que cada cumbre consiste en una negociación internacional sobre acciones para mitigar el Cambio Climático, donde se acuerda seguir con las negociaciones, para sucesivamente acordar qué se necesita para seguir negociando.

Las consecuencias del Cambio Climático

Las consecuencias del cambio climático pueden sintetizarse en tres efectos que son sumamente críticos:

  • Los impactos en los sistemas naturales y sociales en todos los continentes y océanos. La evidencia de los impactos del cambio climático es más sólida y completa para los sistemas naturales causando importantes modificaciones de los ecosistemas y extinciones de especies. (IPCC, 2014) (*4).
  • Una seria amenaza para la seguridad alimentaria mundial que según la FAO (Food and Agriculture Organization de Naciones Unidas) afecta a las cuatro dimensiones de la seguridad alimentaria: la disponibilidad de alimentos, el acceso a los alimentos, la estabilidad del suministro de alimentos, y la capacidad de los consumidores para utilizar adecuadamente los alimentos, incluyendo la inocuidad alimentaria y la nutrición. En el Informe de Cambio Climático de 2014 (IPCC, 2014) se corrobora que los diversos períodos de rápidos aumentos en el precio de los alimentos y los cereales están vinculados a episodios climáticos extremos en las principales regiones de producción indican que actualmente los mercados son sensibles, entre otros factores, a los valores climáticos extremo.
  • Un incremento de la vulnerabilidad social poblaciones más desfavorecidas; la OMS (Organización Mundial de la Salud) reporta que el cambio climático provoca la muerte de 150.000 personas cada año. Según el informe de Cambio Climático de 2014 (IPCC, 2014) se revelan indicadores de que se ha producido un aumento de la mortalidad asociada al calor y una disminución de la mortalidad asociada al frío en algunas regiones como resultado del calentamiento global. Asimismo se observó que los cambios locales en la temperatura y la precipitación han alterado la distribución de algunas enfermedades transmitidas por el agua y vectores de enfermedades. Además estableció que las diferencias en la vulnerabilidad derivan de aparte de factores climáticos, de desigualdades multidimensionales producidas a menudo por procesos de desarrollo dispares, las personas que están marginadas en los planos social, económico, cultural, político, institucional u otro son especialmente vulnerables al cambio climático. Entonces, la vulnerabilidad social es producto de procesos sociales interrelacionados que se traducen en desigualdades en las situaciones socioeconómicas y los ingresos, así como en la exposición. Por otra parte los países con menos recursos tienen mayores dificultades para adoptar algunas respuestas de adaptación y mitigación al cambio climático.

El cambio climático en la Argentina

Existen evidencias científicas que señalan los impactos de este fenómeno en Argentina, especialmente en su sistema climático y en los aspectos físicos y biológicos relacionados con él, generando un conjunto de temas emergentes y heterogéneos en todas las esferas de la vida social.

En las últimas décadas han tenido lugar significativos cambios climáticos e hidrológicos en la Argentina, con los consiguientes impactos que en su mayoría, aún requieren medidas de adaptación o al menos planes de de contingencia.

Entre los más importantes se destacan (PIUBACC, 2008:

  • El aumento de las precipitaciones medias y extremas anuales en casi toda la Argentina y muy especialmente en el Noreste y en la zona oeste periférica a la región húmeda tradicional, favoreciendo la expansión de la frontera agrícola.
  • El aumento de la temperatura en la zona cordillerana de la Patagonia y Cuyo, generando el retroceso de casi todos los glaciares, el aumento del caudal de los ríos y de las inundaciones en todo el país, excepto en San Juan, Mendoza, Comahue y norte de la Patagonia.
  • Aumento del estrés hídrico en todo el Norte y parte del Oeste del país y potencial crisis del agua en Mendoza y San Juan.
  • Alteraciones en el caudal de los ríos de la cuenca del Plata y continuación de la alta frecuencia de precipitaciones intensas e con inundaciones en las zonas actualmente afectadas por estos eventos.
  • Afectación de algunos puntos del litoral marítimo y de la costa del Río de la Plata por el aumento del nivel del mar.
  • Aumento de las enfermedades infecciosas transmitidas por vectores y resurgimiento de otras que fueron erradicadas (paludismo, entre otras).

Pese a que la Argentina expresamente adhiere a proponer y propiciar acciones conducentes al logro de los objetivos y metas contenidas en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, incluyendo el desarrollo de actividades locales de concientización para la mitigación del cambio climático, según lo establece la RESOLUCIÓN 58/2007 de la Dirección de cambio climático dependiente de la Secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable, los episodios meteorológicos de los últimos años ponen evidencia que se ha hecho poco para par respuesta. En este sentido, no se han implementado políticas preventivas de ninguna índole (técnicas, económicas y/o sociales) y la capacidad de reacción que se observa es sumamente improvisada. Siendo el resultado significativas pérdidas económicas, ecológicas y lo que es peor, hacer cada vez más vulnerables a los ciudadanos.

El rol de la universidad en la lucha contra el cambio climático

Las universidades tienen un papel central en la lucha contra el cambio climático porque son quienes pueden contribuir con el conocimiento científico y la investigación para enfrentar este gran desafío. Al mismo tiempo también pueden difundir información significativa, las bases científicas de por qué, cómo y cuáles serán las consecuencias de este nuevo fenómeno.

Las universidades deberían contribuir a generar información actualizada para alertar sobre los posibles impactos del cambio climático y proporcionarnos los insumos necesarios con el fin de que los diversos sectores de la sociedad emprendan acciones efectivas para prevenir mayores pérdidas debido a los desastres climáticos. En este contexto, las universidades, deben generar los mecanismos para reconocer las prioridades sociales en los espacios donde está actuando, siendo clave en este sentido, incluir a la propia sociedad, o sea, abrir el mundo universitario a actores a todos los actores.
Por otra parte se debe capitalizar la capacidad que tienen las Universidades para transformar cosas, pero eso implica un proceso de autocrítica grande, que permita tener impactos positivos en la sociedad y un cambio profundo de los paradigmas en la Universidad, que signifique optar por enfoques formativos e investigativos más técnicos que positivistas e enfatizar la integración en un entorno socio ambiental al que muchas veces no se da respuesta.

 

(*1) PIUBACC, 2008, Desafíos del Cambio Climático y Global en Argentina. Primeras Jornadas Interdisciplinarias de la Universidad de Buenos Aires sobre Cambio Climático y Global. Programa Interdisciplinario de la Universidad de Buenos Aires sobre Cambio Climático.

(*2) Cumbre de la Tierra Johannesburgo+10, Sudáfrica, 2002; COP 1, Berlín, Alemania, 1995; COP 2, Ginebra, Suiza, 1996; COP 3, Kioto, Japón, 1997, Cumbre de la Tierra Nueva York+5, EEUU, 1997: COP 4, Buenos Aires, Argentina, 1998: COP 5, Bonn, Alemania, 1999; COP 6, La Haya, Holanda, 2000 ; COP 8, Nueva Delhi, India, 2002; COP 9, Milán, Italia, 2003; COP 10, Buenos Aires, Argentina, 2004; COP 11, Montreal, EEUU, 2005, COP 12, Nairobi, Kenia, 2006;COP 13, Bali, Indonesia, 2007; COP 14, Poznan, Polonia, 2008; COP 15, Copenhague, Dinamarca, 2009; COP 16, de Cancún, México, 2010; COP 17, Durban, Sudáfrica, 2011Cumbre de la Tierra Rio+20, Brasil, 2012COP 19, Varsovia, Polonia. 2013; COP 20, Lima, Perú. 2014

(*3) Naciones Unidas, 1998, PROTOCOLO DE KYOTO DE LA CONVENCION MARCO DE LAS NACIONES UNIDAS SOBRE EL CAMBIO CLIMATICO, 23pp.

(*4) IPCC, 2014: Climate Change 2014: Synthesis Report. Contribution of Working Groups I, II and III to the Fifth Assessment Report of the Intergovernmental Panel on Climate Change [Core Writing Team, R.K. Pachauri and L.A. Meyer (eds.)]. IPCC, Geneva, Switzerland, 151 pp.